El cuento de un futuro mejor “con más España y más Europa”
/ Ceuta no saldrá del atolladero en el que se encuentra con las políticas actuales
/ Políticos, sindicatos, empresarios y periódicos más centrados en su status y privilegios que en la búsqueda real de soluciones para una ciudad sin rumbo
La tan ansiada aduana comercial se aleja del horizonte ceutí, cada vez surgen más escépticos sobre su puesta en marcha en condiciones normales. Incluso aquellos políticos que priorizaban su apertura ya se refieren a ella como “complemento” pero no como elemento que abandere el futuro de la ciudad.
Cabe preguntarse por qué hemos llegado a esta situación y por qué Marruecos es el malo de la película cada vez que se intenta llevar una furgoneta que vuelve a las pocas horas. Es posible afirmar que en el penúltimo envío los aduaneros de Bab Sebta no tenían conocimiento de que el vehículo iba a presentarse en sus instalaciones. Su sorpresa fue mayúscula. De ahí que no se abriera ni se revisara la carga, pues todo el tiempo se les fue en consultas.
En los próximos días el presidente viajará a Madrid para recabar información directa del ministro Albares. Aún permanece en la memoria aquella llamada del ministro para que Vivas acudiera raudo y veloz a fin de comunicarle la apertura de la aduana comercial, de eso hace un año y algo más.
A diferencia de Melilla, la decisión de unir pareceres en una sola voz resulta interesante, incluso con el añadido de Vox, cuyas declaraciones pidiendo “menos Marruecos” son propias de un inconsciente que no sabe ubicarse, pues de no ser Marruecos y ser otro, ya habría que verle poniendo pies en polvorosa.
La ruta acordada el pasado 15 de enero entre la Ciudad, agentes económicos y sindicatos en la Mesa del Diálogo Social con la vista puesta en la aduana comercial y, en cierto modo, en el futuro económico de Ceuta, fue presentada mediante documento este lunes durante un pleno extraordinario. La iniciativa del Partido Popular fue secundada por todos los miembros de la Asamblea, a excepción de Ceuta Ya!, cuyo líder, Mohamed Mustafa, se mostró muy crítico con el contenido de la propuesta popular.
Mustafa no cree que la propuesta aprobada vaya a ser la solución a los problemas de Ceuta. Criticó en un tono muy duro al presidente Juan Vivas y lo acusó de resumir “en unas cuartillas” su discurso habitual para luego convocar una rueda de prensa para refrendar sus intenciones. Acto seguido, abundó en que el presidente no había consensuado nada con nadie.
“A renglón seguido convoca a sus mariachis para darle un tono folclórico a la iniciativa. Remata convocando un pleno para hacer la foto de familia, sometiendo a su ejército de votantes bien remunerados a desempeñar el papel de comparsas. Eso sí, apelando al diálogo y al consenso, aunque no ha dialogado ni consensuado nada con nadie”, remachó Mustafa.
El dirigente localista defendió un acuerdo de Buena Vecindad con Marruecos a la vez que definió como “engañabobos” el discurso de la Ciudad de “más España, más Europa” y aseguró que lo que esa frase esconde son “más transferencias y más bonificaciones”.
Mientras todo eso ocurre en la Asamblea, Ceuta se apaga de forma progresiva, cada vez hay menos comercios y menos expectativas de futuro, muchas calzadas son intratables para los vehículos, las zonas periféricas parecen sacadas de novelas inquietantes por el anacrónico abandono institucional, la juventud no encuentra motivo para la esperanza, y así tantas y tantas cosas. Echarle la culpa al país vecino siempre fue una buena salida para quienes no tienen justificación. La autocrítica nunca estuvo en sus planes, ni lo estará. Es mucho más fácil culpar al vecino y seguir con las manos abiertas dirección Madrid.