La Gran Mezquita de París establece una “oración por Francia” en todos los centros de culto musulmanes
/ La Gran Mezquita de París pide a los imanes "que introduzcan invocaciones en árabe y francés al final del sermón de cada viernes" por y para Francia
/ Una idea que debería extrapolarse a España para así promover vínculos de solidaridad y fortalecer la diversidad
En una carta enviada el jueves a los 150 imanes afiliados a la Gran Mezquita de París, el rector Chems-eddine Hafiz les pidió que pronunciaran cada viernes al final del sermón la siguiente invocación: "Oh, Allah, preserva a Francia, a su pueblo y a las instituciones de la República. Hacer de Francia un país próspero, seguro y pacífico, donde la comunidad nacional, en su diversidad, sus diferentes religiones, sus convicciones y sus creencias, convivan en seguridad y en paz”
El rector precisa que este enfoque se inscribe en "la aplicación de la adaptación del discurso religioso musulmán en la sociedad francesa iniciada por la Gran Mezquita de París", recordando que algunos imanes ya habían introducido una invocación a Francia tras el asesinato del profesor Samuel Paty en 2020. El rector concluye su carta diciendo a los imanes que prestará “particular atención a la ejecución de su petición por la República”.
Preocupación
Chems-eddine Hafiz viene mostrándose muy preocupado por los altos índices de los discursos de odio que perjudican a grupos e individuos debido a su afiliación religiosa.
En una carta dirigida a Roch-Olivier Maistre, presidente de Arcom, Chems-eddine Hafiz expresa su preocupación por el aumento, en los medios de comunicación y en las redes sociales, de discursos de odio que perjudican a grupos e individuos debido a su afiliación religiosa. "No podemos permanecer insensibles y pasivos ante la liberación y trivialización del discurso esencialista, estigmatizante, racista y de odio contra nuestros hermanos musulmanes", escribió.
“La multiplicación, la repetición y la gravedad de este tipo de declaraciones escandalosas realizadas en determinados medios de comunicación y por determinadas personalidades de los medios son indignas” de una Francia “tan fundamentalmente apegada a la libertad de expresión y a los debates de opinión”, denuncia el rector de la Gran Mezquita de París, que pide "una mayor vigilancia" y una acción más firme por parte de Arcom para contrarrestar esta "evolución peligrosa" que "pone en peligro la cohesión de la comunidad nacional y la convivencia religiosa" en Francia.